Ya estamos...

Ingresá tu búsqueda

#19 • Noviembre 2010 Año I Costumbres Historia

Cerveza (segunda parte)

por Enrique Espina Rawson / Fotos: Iuri Izrastzoff
Compartir

cerveza

Decíamos que los Munich eran otra cosa. Y sí. Si bien constituían una cadena de locales con ese nombre, por extensión se llamaba así a los restaurantes alemanes, con ambiente y comida alemana, esos de ventanas con vidrios emplomados, cabezas de ciervo en las paredes, y tankards de adorno en las repisas. Queda alguno por ahí, todavía, pero, ya no se llaman así, salvo el de Recoleta, que poco o nada tiene que ver con los tradicionales.

cerveza_1

Nadie iba al Munich a comer fideos, ni a tomar gaseosas. Se pedían salchichas con ensalada de papas, o jambonón con chucrut, o chorizo alemán, desde luego con cerveza o con vino Mosela y mientras se esperaba se consumían grandes rodajas de pan negro con picante mostaza.

También te puede interesar  El jardín botánico

cerveza_2

Además de los Munich propiamente dichos: el que estaba en Santa Fe, al lado de la Rural, con patio y glorieta, el de Constitución, famoso por la extraordinaria variedad y calidad del menú, el de avenida Forest, edificio art-decó de los arquitectos húngaros Kalnay, otro sobre Cabildo, por Núñez; por supuesto el fabuloso y paradigmático de la Costanera Sur, hoy Dirección General de Museos, podríamos recordar otros memorables restaurantes alemanes, como el Adam, sobre la bajada de Maipú frente a la Plaza San Martín, famoso por las peleas entre mesas belicosas, que comenzaban arrojándose los redondos posavasos de cartón para terminar a los sillazos, el ABC, de la calle Lavalle, reducto de alemanes con facha de espías nazis, y que aún está; el Zür Post, viejísimo local de la calle 25 de Mayo y Corrientes, con piso de tablas crujientes en donde dos patéticos ancianos de fracs inverosímiles y manos ateridas, intentaban dúos de piano y violoncello desde un minúsculo palquito; el Viena, simpatiquísimo sótano de piso ajedrezado en la calle Lavalle al fondo, casi en la bajada, el Ernestina, de la calle Salta, poco más allá de Constitución, con sus afiches, ventiladores y heladeras enlozadas de los años 30, ya anacrónicos hace 40 años, y en fin, tantos locales inolvidables que hemos olvidado.

También te puede interesar  Editorial #4

cerveza_3

¡Ah!… casi dejamos de mencionar el Hermann, reducto que con sus reservados y espléndida barra continúa abierto -como un baluarte inmune al tiempo- en la esquina de Santa Fe y Armenia, frente al Botánico.

cerveza_4

Insensiblemente los Munich fueron desvaneciendo sus características típicas, para devenir en restaurantes comunes, o simplemente desaparecer. El viejo y querido Edelweiss, emblemático reducto de la farándula a la salida de los teatros, restaurante alemán en sus lejanos comienzos, ha sabido sortear con gran éxito los riesgos de la transición, y airosamente mantiene su decoración primigenia.

También te puede interesar  Ricardo Güiraldes

cerveza_5Pero nos hemos ido alejando del tema en si, que era- recordarán- la cerveza. Ya volveremos, porque queda mucho por decir.

cerveza_6

Artículo anterior
Próximo artículo