Juncal 802

Francesco T. Gianotti, (1881-1967) arquitecto italiano, notoriamente vivió y trabajó la mayor parte de su vida en nuestro país. Sus obras son tan importantes como numerosas. Podríamos citar, así al pasar, la Galería Güemes y la Confitería del Molino, lo que fue el Banco de Nápoli, en la Diagonal Norte, en fin, cantidad de edificios, muchos ya demolidos, que dieron a Buenos Aires la impronta que la distinguió entre tantas otras ciudades, tanto como para merecer el romántico nombre de “Reina del Plata”.

Como trabajó en sus proyectos más de 50 años, no es extraño que, siguiendo las corrientes predominantes de cada época, existan obras suyas en todos los estilos. Nos llamó la atención un muy elegante edificio racionalista, ubicado en la esquina sur-oeste de Esmeralda y Juncal, exactamente en el 802 de esta arteria y frente al edificio Minner del arquitecto húngaro Jorge Kálnay, del cual ya nos hemos ocupado.

Una placa negra, ubicada en la vereda frente a la entrada, como sucede con otros tantos edificios notables, nos informa del autor, del proyecto y del nombre del edificio: Edificio Carrizo, apellido del comitente de la obra. Pero como año de construcción, puede leerse 1962. Por supuesto este dato es erróneo, producto de la imaginación o la ignorancia.

Cualquiera que vea esta sólida edificación se da cuenta que la fecha aventurada es inverosímil.

Efectivamente, la finalización de la obra ocurrió en 1936, según toda la documentación existente. Ya dijimos que el estilo es racionalista, coincidente con la época mencionada, pero lo interesante es que tiene una decoración muy discreta art-decó.

Art-decó es la magnífica puerta de dos hojas de rejas de estilizado diseño, como es también art-decó el hall de entrada, que combina mármoles de distinto color, y también lo es la escultura que iluminada desde atrás, da al ambiente un aire de templo milenario.

Dos guardas sobre las fachadas de las dos calles, que corren simétricamente a lo alto de todo el edificio, como franjas que ocultan o disimulan pequeñas aberturas de ventilación, y franjas horizontales de decoración geométrica, son asimismo netamente art-decó.

Lamentablemente, los aparatos de aire acondicionado han proliferado como indeseables excrecencias que trastornan y degradan la nitidez de las superficies proyectadas por el ilustre arquitecto Gianotti. Suponemos que esto no tiene solución.

Aunque quizás si lo tenga la placa equivocada: si alguien conoce a alquien que conozca a alguien que sea pariente o conocido de alguien que pueda hacer algo como para enmendar la errónea fecha que desinforma a eventuales lectores, será acreedor moral de los buenos vecinos de la ciudad. Algunos quedan… — FXBA